Por: Adalberto Zambrano Barrios
Doctor en Ciencia Política, Master en Gerencia y Economista.
Egresado del Programa de Negociación y Persuasión en la Universidad de Harvard.
Podemos entender por CAPACIDAD DE GOBIERNO, la capacidad que tiene un gobierno para dotarse de tres elementos claves que lo ayuden a cumplir con su razón de ser: coordinar esfuerzos para facilitar las condiciones que permitan mejorar la realidad social, económica, cultural y educativa de la población que gobierna. Estos tres elementos son:
- a. Proyecto de gobierno (plan u hoja de ruta).
- b. Determinar el nivel de gobernabilidad de ese proyecto, construyendo viabilidad a los objetivos y operaciones del plan a través del uso de estrategias adecuadas.
- c. La capacidad del equipo de políticos, gerentes y operadores del gobierno capaces de ejecutar, evaluar y comunicar los resultados del proyecto concretado en la gestión de gobierno.
La Capacidad de Gobierno está conformada por dos elementos claves:
- a. La capacidad personal del gobernante y su equipo de gobierno.
- b. La capacidad institucional del gobierno referida a cuatro plataformas básicas: los procesos medulares y de apoyo de la organización gubernamental; su estructura organizativa en función de los procesos medulares y de apoyo; la plataforma tecnológica (hardware, software, equipos, redes), y la plataforma humana (el equipo que gobierna y colaboradores).
La capacidad personal del gobernante y del equipo del gobierno está dada por el nivel de formación, conocimientos y manejo de herramientas en ciencias y gestión de gobierno, por la cultura de la persona que en gran medida está dada por la lectura de libros y artículos especializados en política y en el arte de gobernar. Mientras que la capacidad institucional implica transformar el aparato organizativo del gobierno ( plan, procesos, estructura, tecnología y plataforma humana ) en una base moderna, dinámica capaz de dar respuesta a las demandas del propio equipo del gobierno y de la población que se gobierna.
Gobernar implica hacer política desde el arte de diseñar y hacer gobierno diferente con resultados de alto valor que impacten favorablemente a los gobernados. En un período de 4 años, como el que tienen las gobernaciones y alcaldías en el país, es mucho lo que se puede avanzar en este sentido, teniendo claro el Qué y el Cómo. Existen los conocimientos, hace falta la voluntad política.
Maracaibo, San Francisco y el Zulia todo, necesitan elevar la capacidad de gobierno de sus gobiernos estatal y municipal. Para ello hará falta un Instituto de Altos Estudios en Gestión de Gobierno que adelante un proceso de gran alcance y continúo de formación, investigación, preparando el talento que se requiere para gobernar hoy y en el futuro.