MARACAIBO, ZULIA Y LA NUEVA ECONOMÍA

doctor gerencia

Por: Adalberto Zambrano Barrios
Director General de AZB Consultores
Dr. en Ciencia Política, Master en Gerencia y Economista.
Egresado del Programa de Negociación y Persuasión en la Universidad de Harvard.

El crecimiento económico de una empresa, de un municipio, estado o país, no es producto del azar o de la suerte, el mismo responde a una estrategia deliberada por parte del actor o actores claves, para alcanzar unos objetivos haciendo uso de sus fortalezas internas y aprovechando las oportunidades externas, teniendo los actores una voluntad férrea para hacerla viable y concretarla.

Estoy convencido que Maracaibo y el Zulia pueden ser el epicentro económico del occidente venezolano, del nororiente colombiano y el Caribe. Para ello se requiere de una estrategia para el crecimiento que establezca la direccionalidad, teniendo claro El Qué ( objetivos y metas ); el Cómo lograrlo ( operaciones, proyectos, acciones, alianzas, acuerdos ) y la voluntad inquebrantable de los actores claves ( empresarios, políticos, gobierno, gremios empresariales, universidades, los jóvenes como nuevos talentos.

Esa nueva estrategia para el crecimiento económico de Maracaibo y el Zulia, debe tener como foco de atención la Nueva Economía.

¿En qué consiste la Nueva Economía?
Es aquella economía basada en el conocimiento, información y comunicación (TIC): ordenadores, software, telecomunicaciones, microprocesadores e Internet.

¿Cuáles son las características de la Nueva Economía?
Economía mundial más abierta; globalización de los gastos de los consumidores; imparable avance tecnológico con un  mundo digitalizado; relevancia al tema ecológico; se reduce la presencia del Estado en la producción y en el comercio; se reducen las fronteras entre paises; aparecen más y mejores productos.

¿Qué requiere Maracaibo y el Zulia para lograr su crecimiento económico?

  1. Una estrategia para el crecimiento económico, con objetivos y metas claras (el qué), con operaciones, proyectos y acciones bien diseñadas (el cómo).
  2. Voluntad sólida basada en el consenso mínimo de los actores políticos, gubernamentales, económicos, académicos y los nuevos talentos.
  3. Condiciones mínimas para atraer inversiones de capital: confianza para el inversionista, la cual la debe generar el estamento legal nacional, estadal y municipal; mejorar las capacidades portuarias, aeropuertarias, vialidad hacia y desde la frontera; electricidad, agua y telecomunicaciones, salud y educación.
  4. Política tributaria nacional, estadal y municipal que facilite la inversión, y un riesgo razonable, que facilite en el inversionista la decisión de invertir, producir y crecer.

Maracaibo y el Zulia tienen las condiciones, hace falta la voluntad y la estrategia.

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